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Clientes tóxicos: qué hacer con ellos y cómo tratarlos

por | Mar 7, 2023 | Ventas | 0 Comentarios

Los clientes son fundamentales para tus ventas, pero cuando llega uno difícil todo puede convertirse en un mal negocio. Te contamos cómo identificarlos, tips para interactuar con ellos y cómo mantener una buena experiencia y ambiente en tu tienda.


Uno de los grandes retos a los que nos enfrentamos a diario en nuestro negocio es el contacto y manejo de clientes. Hay de todo: los que valoran tu trabajo y experiencia, el que siempre paga y nunca pide fiado, esos amables que te hacen el día…

pero también encontramos la otra cara de la moneda. Hablo de los clientes difíciles, esos que nos sacan canas verdes y que en más de una oportunidad han despertado al Hulk que vive dentro de nosotros: los famosos “clientes tóxicos”.

 

¿Tenemos que soportar a un cliente grosero?

 

Si sabemos que cada cliente representa un peso más en la cartera…

 

¿Hasta donde debemos soportar a los clientes difíciles?

 

Lidiar con una persona grosera puede ser el punto negro de nuestro día laboral: más allá
que se retire, somos nosotros quienes quedamos con un mal sabor de boca. Una mala
experiencia nos hace más complicado continuar nuestras actividades con ánimo, y muchas veces seguimos atendiendo a la defensiva y de mal humor a los próximos clientes.


Historias de (clientes del) terror…


“Una vez, un tipo sacó una navaja y la neta no dejé que el miedo me consumiera (aunque por dentro decía ‘ojalá no me la clave…’). Lo desarmé y lo saqué de la tienda, y cada que me ve se agacha y su hermana es la que entra a comprar”

      Alex.

“A mi me dieron una buena paliza. Estaban tomando varios afuera, y uno entró por un cigarro; de repente llegaron otros (pero en su sano juicio) y comenzaron a golpear al del cigarro pero adentro de mi tienda, y empezaron a tirar todo. Me salí del mostrador para
correrlos: terminé con una costilla rota, me descalabraron en la nariz y estuve 3 meses en cama.”

–      Norberto.

“Yo corrí a una doña que anduvo diciendo de casa en casa que no vinieran a mi tienda porque mi esposo y yo teníamos COVID y que así estábamos trabajando, siendo que no era cierto. El día que se paró en mi tienda, la corrí.”

–      Angelica.

“Una vez con un chofer… siempre que iba, quería que lo estuviera viendo a la cara porque le gustaban mis ojos, y así. Hasta que ya no me pareció y le dije que no molestara.”

      Mari.


* Los nombres fueron cambiados para proteger la identidad de quienes contaron estas experiencias con clientes tóxicos.


¡No caigas en el juego de los clientes tóxicos!


Recuerda que entre tu cliente y tú hay una relación de confianza, y como en toda relación, debes aprender a establecer límites; checa estos tips que tanto tú como tus clientes deben respetar:


      No seas indiferente. Debes estar consciente que las actitudes groseras no deben ser toleradas y mucho menos normalizadas.


      Mantén la calma, siempre. Muchas veces es conveniente retirarse durante algunos segundos, respirar y moderar nuestra voz.


      La importancia de tu autoridad. Dale voz y empodera a tus empleados para que tengan herramientas para tomar decisiones rápidas y efectivas en c, ayudará a controlar la situación.

     Refuerza tus valores. Cuando se presente una situación tóxica con algún cliente, es
importante meditar si está rebasando los valores que fijaste como pilares de tu negocio.

      Pide ayuda. Si la situación que estás viviendo con el cliente sobrepasa un límite y te hace sentir incómodo o pone en peligro tu integridad física y la de los demás, es importante denunciar la situación.


Tipos de clientes tóxicos: ¿Cómo los identifico?


Los clientes siempre dan pequeños indicios de cómo son inconscientemente a través de su tono de voz o su forma de pedir las cosas. Estas son las “banderas rojas” para identificarlos:

·     Actúa de manera abusiva, grosera o imprudente todo el tiempo;

·     Hace comentarios al aire demeritando tu negocio o trabajo delante de otros;

·     Siempre tiene problemas o una excusa para pagar por el producto o servicio;

·      Exige, dice que el cliente siempre tiene la razón y cree que lo sabe todo.


Te lo agradezco, pero… ¡NO!


Los conflictos con clientes pueden ser algo completamente normal a la hora de tener un negocio, y muchas veces estos se resuelven fácilmente con una dosis de buena comunicación y actitud entre ambas partes. El riesgo surge cuando el conflicto es
injustificado o generado unilateralmente por un cliente difícil que busca generar permanentemente situaciones molestas.
Cuando se sobrepasan todos los límites habidos y por haber, y agotaste todos los tips para manejar a un cliente difícil, es hora de cuestionarse si vale más el dolor de cabeza y lidiar con él que lo que realmente dejaría de ganancia por su compra. Si la respuesta es “estoy regalando mi tiempo, esfuerzo, ganas y estrés por un mal cliente”, lo mejor es cortar por lo sano.

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